Los Regulares son una de nuestras Unidades militares más desconocidas, a pesar de ser la más condecorada del Ejército español. Nacidos al calor de las guerras que España ha librado en el norte de Marruecos desde finales del siglo XIX, su extrema vanguardia les ha hecho acreedores de una historia repleta de dureza, valor, sacrificio y heroísmo, y por supuesto, del reconocimiento oficial que se merecen.
Su mejor apelativo ¡Fiel Regular! ha sido conquistado por su lealtad, su valor probado en el combate y su eficacia como fuerza de choque.
En ellos se conjuga con maestría nuestro espíritu de frontera. Ubicados en Ceuta y Melilla, forman parte, como siempre, de la vanguardia en la defensa de la seguridad de España. Frente a los riesgos derivados de la complejidad geoestratégica del Sahel y del equilibrio inestable de una zona que aúna su condición de puerta del Mediterráneo con la de frontera africana, los Regulares forman parte imprescindible de la punta de lanza de nuestra seguridad y de la de la propia Europa.
Herederos de los distintos grupos históricos que se han creado a lo largo de sus 111 años de historia, hoy están reorganizados en dos grandes unidades: el Grupo de Regulares 52 de Melilla y el Grupo de Regulares 54 de Ceuta. En ellos sus militares trabajan duro para mantener en estado óptimo su formación tanto física, como moral y táctica.
Entre las actividades que realizan periódicamente destaca el " Viernes Regular", un tradicional acto militar cuya finalidad es cohesionar a todos los integrantes de la Unidad, y que el pasado día 11 se celebró en el Acuartelamiento "González Tablas" de Ceuta.
Presidido por el general de la COMGECEU y bajo el mando del Jefe del GREG54, el coronel Moro Sanjuán, las unidades participantes en la formación arroparon a la Enseña Nacional del Grupo que presidió el acto en el que se llevó a cabo la imposición de condecoraciones, así como la entrega de nombramientos de “Regular Distinguido”, con los que se premia a los Regulares de la unidad más destacados durante los últimos meses.
En su alocución el coronel Moro, que presidía su último Viernes Regular puesto que próximamente se despedirá de la Unidad, ha tenido un recuerdo especial para el cabo Dris asesinado recientemente, así como para todos los que habían recibido alguna distinción.
En su despedida el coronel hizo un recorrido por las prendas que caracterizan el uniforme del soldado de Regulares, buscando en ellas y en su singular estética, el espíritu que les caracteriza como Unidad heredera de una idiosincrasia original.
Para el Jefe del GREG54 “El Tarbuch constituye nuestra prenda más característica, señal de identidad y motivo de orgullo. Su uso conlleva el compromiso de portar con honor lo que otros llevaron con valor”, un valor que los Regulares han demostrado a lo largo de su historia, y que les convierte en la Unidad más condecorada de nuestro Ejército.
En palabras del coronel “el alquicel blanco representa el honor limpio y su vuelo blanco, en el desfilar ceremonioso y sosegado del soldado de Regulares, constituye una expresión externa del orgullo de pertenecer a estas Fuerzas, de su ejemplaridad, del honor y del sentido del deber”. Y “el sulham azul como el mar del Estrecho que nos rodea representa, complementando al alma blanca del alquicel que lo envuelve, la nobleza del soldado de Regulares”
Para el coronel Moro “la skara, la mochila de combate del soldado Regular representa el enorme espíritu de sacrificio de estas fuerzas de choque” y recuerda al soldado de Regulares “que el espíritu de sacrificio antepone el cumplimiento del deber a las comodidades, los intereses y las aspiraciones personales”
Las botas negras, las de la Infantería ligera española, lustrosas y brillantes, perfectamente acordonadas, evocan la excelencia profesional del soldado de Regulares, lo que implica en palabras del Jefe del GREG54 “la obligación de estar moral, intelectual, técnica y físicamente preparados, para ser eficientes en nuestro trabajo”
"Así, tal cual deja entrever vuestro impresionante uniforme, sois los Regulares"
Tras el solemne homenaje a los caídos en el que participaron los familiares del cabo Dris, la formación entonó su himno y desfiló con su carácteristico estilo ante las autoridades y el público asistente.
Su paso lento, cadencioso y solemne en los desfiles se conjuga a la perfección con su espíritu de infantes, siempre preparados para intervenir cuando sea preciso y donde España lo necesite a la voz de ¡Fiel Regular!
Os dejo el enlace del vídeo de este Viernes Regular .